04-02-2015
Durante el último trimestre de 2014 empezó a constituirse el Frente Nacional de Trabajadores no Dependientes, una alianza de distintas organizaciones de trabajadores por cuenta propia y vendedores informales que ya operaban en mercados municipales y en espacios a cielo abierto de diversas partes del país. La idea de agruparse es exigir de manera conjunta mejores condiciones para realizar su actividad.

Alfredo Padilla, director general de la Asociación de Trabajadores, Emprendedores y Microempresarios (ATRAEM), que forma parte de esa alianza, informó que el Frente de Trabajadores no Dependientes presentará un documento al Ejecutivo Nacional solicitando que los vendedores informales sean incorporados al sistema de distribución formal de productos básicos, con el propósito de que ellos puedan expenderlos cumpliendo con lo establecido en las regulaciones y normas vigentes.

Padilla explica que esto podría lograrse recurriendo a las ordenanzas y a los registros de comercio informal con los que cuentan las distintas alcaldías. “Le dices a las alcaldías: yo quiero que usted me reporte a mi cuáles son los trabajadores y que están autorizados en ese espacio público y de acuerdo con esa cantidad les va a corresponder una distribución adecuada de productos regulados, y así ellos no podrán decir que tienen que vender mas caro”, expresó.

El director de ATRAEM, afirma que esta propuesta ya se ha dado a conocer a representantes de algunos entes oficiales, pero que hasta ahora el Frente de Trabajadores no Dependientes no ha obtenido respuesta.

Padilla sostiene que la economía informal es una realidad que no se puede ignorar y que una vía para atender la situación de quienes se encuentran en este sector es incrementar el número de puestos de trabajo en el sector formal, promoviendo la creación de nuevas empresas.

El representante de la Asociación de Trabajadores, Emprendedores y Microempresarios, destaca que no se puede generalizar señalando que todas las personas que realizan las colas para adquirir productos de primera necesidad son revendedores. Explica que algunos ciudadanos requieren de esos artículos e insumos para prestar servicios o elaborar productos cuya venta constituye su ingreso económico principal.

“Vamos a poner por caso, (las) reposteras que necesitan hacer tortas, tienen que ir más veces a buscar azúcar que tú que no eres repostero y te van a ver más frecuentemente porque si te venden un kilo por cada visita a al mercado, o vas a varios mercados para obtener el kilo de azúcar o vas al mismo mercado repitiendo varias veces, es la única manera que tú sigas viviendo de fabricar tortas. Igual pasa con la harina cuando se trata de la gente que vive de la venta de empanadas en el barrio, o de arepas; igual pasa con el cemento del que va de ferretería en ferretería buscando cemento porque es albañil”, ejemplifica Alfredo Padilla.

El director de ATRAEM destaca que no puede negar que hay personas realizan las filas para revender esos productos, pero que en el caso de quienes requieren estos artículos como insumos, deben experimentar el “rigor de las colas” como ciudadanos y como emprendedores. “Ese tema hay que verlo con mayor comprensión y no nada mas que en términos descalificativos”, afirmó.

Actualidad Laboral/JM