Avance exponencial de la digitalización, equipos remotos, sistemas híbridos y nuevas expectativas de gestión y liderazgo, son algunos de los cambios que han tenido lugar en el mundo del trabajo, especialmente a partir del impacto de la pandemia. Pero, aún en un nuevo contexto, las celebraciones de fin de año empresarial no solo conservan su vigencia, sino que podrían haberse convertido incluso en un evento organizacional clave para los equipos; y surge la pregunta ¿por qué organizar una celebración de fin de año empresarial?
En esta línea Federico Gelblung , customer success team de VISMA Latam, observa que "aunque las celebraciones corporativas son siempre relevantes, en un contexto mundial altamente estresante, de permanente adaptación al cambio y muchos equipos que han dejado de compartir la cotidianidad de la oficina, la fiesta de fin de año empresarial cobra especial importancia para reconocer los logros obtenidos. Esto no solo se traduce en una cultura organizacional positiva, que a la larga redunda en la prosperidad de la compañía, sino que también implica importantes beneficios para los trabajadores”.
Estos son algunos de los objetivos y razones por las cuales llevar a cabo una celebración de fin de año empresarial:
Motiva al personal: La fiesta de fin de año empresarial es una excelente oportunidad para distinguir a los talentos, favoreciendo su compromiso e impulso. Además, puede impactar positivamente en la conservación de talentos, en tanto que, así como los logros, el reconocimiento incide notoriamente en la satisfacción laboral y el engagement.
Fortalece los equipos: Cuando no se comparte el día a día en la oficina, puede resultar desafiante trabajar en conjunto. Contra esta tendencia, la fiesta de fin de año empresarial contribuye a consolidar los vínculos e incrementa la cordialidad entre compañeros de trabajo.
Fomenta el optimismo: Los desafíos cotidianos muchas veces cobran centralidad frente a las pequeñas victorias diarias. En cambio, celebraciones corporativas como la fiesta de fin de año ayudan a redirigir la atención hacia los aspectos positivos.
Ayuda a renovar energías: Tras un año de intenso trabajo, hacer una pausa y descomprimir podría contribuir a la creatividad e ideas innovadoras.
“En muchas organizaciones, el trabajo híbrido o remoto es la nueva realidad. Pero, así como con sus evidentes ventajas, estos modelos laborales pueden llevar a que muchos colaboradores no se sientan tan conectados con el equipo como los trabajadores presenciales. Especialmente entre ellos, la celebración de fin de año empresarial puede ser una excelente aliada para reforzar la moral. Mientras que quienes trabajan remoto desde la misma ciudad pueden fácilmente sumarse al festejo presencial, es importante hacer partícipes también a quienes no podrán estar ese día. Para eso, puede considerarse una celebración en dos partes, que contemple un espacio virtual de intercambio de palabras de agradecimiento y brindis”, dice Gelblung.
Actualidad Laboral / Con información de Americaeconomia