Portugal es el país de moda en Europa por su éxito económico y sus políticas sociales. El país luso fue rescatado en 2011 y tocó fondo con la crisis en 2012 y 2013; pero seis años más tarde, los números rojos son historia bajando la tasa de paro del 16% al 6,7% actual, incluyendo un descenso notable del desempleo entre los jóvenes. Buena parte de este triunfo radica en las medidas de empleo que se ponen en marcha vía el Instituto del Empleo y la Formación Profesional (IEFP), como el último proyecto llamado 'Programa Regressar'.
La iniciativa del Gobierno de Portugal consiste en hacer que vuelvan al país los trabajadores que se fueron al extranjero, hace unos años, en busca de una vida mejor. Para ello, el IEFP dispone este año de 10 millones de euros, pudiendo recibir los emigrantes que se adhieran al programa hasta 6.536,4 euros para ellos y sus familias. El programa comienza en julio y en esa ayuda económica se incluyen pagos directos, así como el pago compartido de los gastos del viaje y del transporte de los bienes de los beneficiarios, según informa el diario portugués 'Público'.
En 2019, aproximadamente 1.500 personas harán uso de esta medida tal y como declaró el Secretario de Estado para el Empleo, Miguel Cabrita, y el principal requisito es que los emigrantes vuelvan al Portugal continental con un contrato de trabajo. "Los programas de regreso de emigrantes son complejos. Del mismo modo que las personas no tomaron la decisión de irse a la ligera, regresar tampoco es un asunto inmediato", añade Cabrita. Además de volver con un contrato laboral, pueden participar en el proyecto los emigrantes que salieron de Portugal antes del 31 de diciembre de 2015, que vivieron fuera al menos 12 meses y que inicien o hayan iniciado su actividad laboral en su lugar de origen entre el 1 de enero de 2019 y el 31 de diciembre de 2020. Los descendientes de portugueses también pueden aplicar.
Actualidad Laboral / Con datos de La Información