Según una encuesta de Trend Micro, los profesionales TIC se sienten aislados del resto de la empresa y creen que no reciben el apoyo necesario por parte de los correspondientes órganos de decisión. Una tendencia que es especialmente palpable en el caso de la ciberseguridad.
Así pues, y pese a que muchas compañías han ido incorporando al CIO o al CSO a sus juntas directivas, la mayoría de los encuestados no ve ningún beneficio inmediato de esa presencia al más alto nivel. De hecho, casi la mitad de ellos “lucha a diario para traducir amenazas complejas a los líderes de su organización” y más de la mitad ve la comunicación interna como el mayor desafío en materia de ciberseguridad.
A menudo, solo se escuchan sus sugerencias y peticiones cuando ya es demasiado tarde, por ejemplo, después de un ataque cibernético. “A medida que los ataques cibernéticos aumentan en volumen y sofisticación, la responsabilidad debe compartirse. Ninguna empresa puede permitirse el lujo de que la función de TI sea una isla. Esto significa cambiar la mentalidad de la ciberseguridad como una iniciativa independiente a una responsabilidad compartida en toda la organización”.
Todo esto en un contexto donde los equipos de TI están bajo una presión cada vez mayor. No en vano, los ejecutivos de TI están sintiendo el peso de los crecientes desafíos de su rol hasta el punto de que un tercio de ellos se siente menos satisfecho con su trabajo en los últimos 12 meses.
Actualidad Laboral / Con información de TicBeat
