La realidad económica y social que enfrenta el país en estos momentos ha impactado de manera desfavorable el ánimo y la tranquilidad de numerosos ciudadanos. Algunas empresas han experimentado que ésta también ha incidido en el entusiasmo de sus colaborados y en el clima laboral de las organizaciones.

César Yacsirk, vicepresidente de la Sociedad Venezolana de Psicología Positiva, sostiene que los ciudadanos no pueden negar la realidad, pero que ésta no puede conducirlos a disminuir su actividad y a dejar de realizar las acciones personales y profesionales que requiera.

El psicólogo sostiene que diversos aspectos de la realidad resulten adversos, las personas deben identificar y valorar los aspectos positivos de  su vida personal, familiar y profesional;   y no generalizar la calificación negativa para todos. Dice que ante las situaciones difíciles las personas deben buscar emociones positivas y apreciar tanto los logros pequeños como los grandes. “Vincularse con otras personas, mantener grupos de apoyo, con gente que te pueda de alguna manera dar soporte en los momentos en los que tienes situaciones complicadas”, dice.

Yacsirk afirma que también hay que evaluar la forma cómo las creencias de cada persona la llevan a acercarse a la realidad, porque éstas pueden conducirla a hacerlo de manera inadecuada. “Las cosas no son eternas y son eternas en la medida en que tú como persona piensas que son eternas y las generalizas. Si piensas que todo está mal, eso significa que todas las situaciones están mal, eso hace que te inmovilices y no hagas absolutamente nada. El pensar que un aspecto de tu vida no está bien es diferente, porque te hace pensar en todos los demás aspectos de tu vida que están funcionando”, dice.

El vicepresidente de la Sociedad Venezolana de Psicología Positiva, dice que ante las situaciones adversas, quienes ocupan posiciones gerenciales en las empresas, deben trabajar en temas de resiliencia con sus trabajadores “¿Cómo recuperarse de situaciones difíciles? y sobre todo aprender de lo que sucedió, de lo que vivió, porque lo que hemos observado también es que en muchos casos el que está de capa caída es el supervisor o el padre de familia, eso hay que trabajarlo directamente”, afirma.

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