Se calcula que las personas trabajamos unos 227 días al año, 1.816 horas. Si esto es así, sería excelente que el trabajo nos hiciera felices o al menos no nos procurara infelicidad. Pero en la inmensa mayoría eso no ocurre. De hecho, no sólo no somos felices con nuestro empleo sino que tampoco, en muchos casos, estamos comprometidos con él.


Y es que cuando el trabajo deja de interesarnos, dejamos de comprometernos. Es la desmotivación laboral, que ampliada, nos lleva a lo que los anglosajones llaman burnout, y que nosotros traducimos como 'síndrome del trabajador quemado'.


La desmotivación en el trabajo puede ser muy variada, dependiendo de cada persona y situación. Sin embargo, podríamos decir que la desmotivación laboral es la situación de aburrimiento, desinterés o apatía que puede sentir un trabajador respecto su puesto de trabajo. Las causas son muchas y varían dependiendo del empleo y el empleado, pero básicamente son estas que resumen los expertos en recursos humanos de Esneca Business School:


Desconexión o aislamiento


Una causa muy notoria tras la implantación del teletrabajo en nuestras rutinas es la sensación de desconexión o aislamiento. Después de trabajar durante años en crear una estructura laboral basada en el trabajo en equipo y en la motivación grupal, algunas empresas no han sabido mantener esta metodología. Sentirse ‘solo’ en un proyecto puede causarnos aburrimiento y desmotivarnos.


Comunicación pobre y mal gestionada


Una comunicación interna mal gestionada puede ser también una causa de la desmotivación de los empleados. La incapacidad de comunicarse con los rangos superiores, el miedo a hacerlo o la inseguridad de las consecuencias puede conducirnos a una sensación de desmotivación en el trabajo.


Estancamiento económico


Es completamente usual que, al empezar en una empresa, casi no le demos importancia al sueldo o remuneración que percibimos. Entre la ilusión por aprender nuevas cosas, las ganas de encajar en el equipo y el empeño en demostrar nuestra valía, el sueldo ocupa otros lugares secundarios. Sin embargo, cuando un empleado lleva años en el mismo trabajo y su sueldo se mantiene estancado, este puede sentirse desmotivado.


Monotonía


Otra de las grandes causas de la desmotivación laboral es la monotonía. Realizar cada día el mismo trabajo las mismas tareas y al mismo ritmo puede resultar agotador tanto mental como físicamente.


Desacuerdo con la filosofía empresarial


¿Un vegetariano trabajando en una empresa de embutidos? Pues ocurre más de lo que pensamos. El desacuerdo con la actividad o filosofía de la empresa puede causarnos no solo malestar con nosotros y nuestro alrededor, sino también desmotivación laboral.


Actualidad Laboral / Con información de 20Minutos