A la hora de querer conocer el destino que va a tener cualquier empresa, no basta con analizar la hoja de ruta que marca su estrategia de negocio. Un factor indispensable que acompaña a que la empresa alcance el éxito es el capital humano. Todos los empleados que aportan su punto de vista, su talento y su forma de ser, conforman el esqueleto de cualquier compañía.


Las nuevas generaciones han traído consigo una forma de trabajar completamente distinta a la que se venía ofreciendo. Por eso, es importante conocer qué perfiles de trabajadores conforman tu negocio, para así saber qué necesitan ellos como profesionales y qué necesita tu empresa como negocio. Identificar sus necesidades, ayudará a que se sientan más cómodos en su puesto de trabajo y aumenten su productividad en pro de la empresa.


Cada negocio debe contar con un equipo integrado por aquellos perfiles que hagan falta. Sin embargo, hay determinados tipos de empleados que deben estar sí o sí para que la empresa sea competitiva y triunfe:


- El colaborativo: Es aquel empleado que realiza su trabajo correctamente y siempre está dispuesto a ayudar a sus compañeros, a realizar actividades en beneficio de la empresa, y que disfruta con esto de servir y ayudar.


- El mentor: No hay que dar carpetazo a aquellos jóvenes talentos que están dispuestos a aprender en el seno de una empresa. Por eso, y para quitar trabajo a los dueños del negocio, este tipo de empleado ayuda a construir a la siguiente generación de líderes.


- El ‘millennial’: Conocedor de lo más actual y experto en habilidades sociales; el empleado ‘millennial’ siempre está activo. Esto se traduce en un interés por llegar a cargos de dirección en poco tiempo.


- El eficiente: Organizado, responsable y comprometido, siempre hace aquello que se le pide de una manera excepcional.


oficina-trabajo-2


- El optimista: Es necesario tener en el equipo a alguien que sepa mostrar la luz al final del túnel, si algo se tuerce o va mal en la compañía.


- El creativo: Todo negocio necesita de una mente creativa, que sea capaz de proponer ideas para desarrollarse y prosperar.


- El polifacético: Aquel empleado que pueda trabajar y aportar algo, en varias áreas de la compañía, es inmensamente valioso.


- El desafiante: No siempre es bueno tener un equipo que te de la razón en todas tus decisiones, sino que también es bueno contar con alguien capaz de hablar y mostrarse crítico; pues, generar una atmósfera de debate siempre es beneficioso para la empresa.


Actualidad Laboral / Con información de Forbes España