12-08-2016
Más del 80% de sector privado venezolano ubicado en la zona fronteriza con Colombia, está en crisis, según el presidente de Fedecámaras del estado Táchira, Daniel Aguilar. A propósito de la reapertura anunciada para este sábado 13 de agosto aclaró que “se va a abrir de forma peatonal, y ¿cómo garantizamos el ingreso al país de algunos insumos, materia prima, repuestos, que son necesarios para la industrias que están paralizadas en la frontera y otras partes del país?”.

De esa manera, el vocero del sector privado regional señaló que esta medida favorece al comercio del vecino país y, en todo caso, al consumidor venezolano, que podrá ir a comprar lo que necesita. A su juicio se requieren medidas adicionales que permitan la recuperación económica en la zona, además de decidir la apertura total del paso entre ambas naciones, de personas y productos.

“Estamos pidiendo al Presidente que una manera de oxigenar la zona fronteriza, rescatarla de la forma paupérrima en que está, que le permita a los comerciantes legalmente establecidos (los tienen patente de industria y comercio, registros mercantiles, permisos al día) importar unos 10 mil dólares mensuales de mercadería, de comida, de insumos, de materia prima, para que sean vendidos en Táchira”, expresó Aguilar.

Esto sería a través de la flexibilización del control de cambio, que permita a los empresarios venezolanos hacer uso de los créditos que, según dijo, aún tienen algunos en el exterior. “Esto va a beneficiar al Gobierno nacional, porque nos tocaría pagar los impuestos de importación, las patentes de industria y comercio en las alcaldías de la zona, y vamos a generar empleo”, explicó.

Año de pérdidas

El presidente de Fedecámaras del estado Táchira exhortó a los comerciantes e industriales de la zona fronteriza a que “ejerzan las acciones legales para que sean resarcidos los daños y perjuicios”, tras un año de cierre de paso entre Venezuela y Colombia. Sin embargo no precisó a cuánto ascienden las pérdidas “cuantiosísimas” que ha dejado esta medida adoptada por el Gobierno de Nicolás Maduro, de manera unilateral.

Según explicó la mayoría de las empresas han tenido que cerrar sus puertas y, por lo tanto, han obligado a despedir a su personal. “Lo que se vio allí fue pérdida, por en la frontera se producía ropa, calzado, electrodomésticos, cauchos, productos derivados del plástico”, agregó.

No a la cédula froteriza

"Eso no es más que crear cuellos de botella" y fuente de corrupción, considera el dirigente empresarial la creació de la cédula fronteriza anunciada esta semana. "¿Para qué cargamos pasaporte y cédula de identidad?", se preguntó.

Lamentó que el Gobierno de Venezuela no consulte a los sectores de la sociedad para tomar las decisiones, a diferencia de lo que ocurre vecino país, donde las autoridades nacionales, regionales y locales "se han reunido con los gremios colombianos representados en la Cámara de Comercio de Cúcuta y la Federación Nacional de Comerciantes".

Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas
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