28-11-2023
y en buenas condiciones de salud. Informó este martes el gobierno del estado de Uttarakhand. Los obreros habían quedado atrapados el pasado 12 de noviembre, cuando ocurrió un derrumbe en el túnel en el que trabajaban en Silkyara, a unos 400 kilómetros al norte de Nueva Delhi.
Rescatistas trabajaron día y noche para crear una abertura entre los escombros, e introducir un tubo de 90 cm de diámetro; por el cual pudieron salir, uno a uno, todos los trabajadores atrapados. Previamente, las autoridades habían estado suministrando a los obreros oxígeno, comida y agua a través de una estrecha tubería.
El rescate generó gran alivio y júbilo mientras salían los obreros.
Fueron revisados por médicos y transportados en 17 ambulancias, para recibir atención en el Hospital Base Chinyalisaurio.
El primer ministro de India, Narendra Modi, elogió a los rescatistas y a los hombres atrapados. "El éxito de la operación de rescate de nuestros hermanos trabajadores en Uttarkashi, nos ha emocionado a todos", dijo en sus redes sociales.
"Es una gran satisfacción que, después de una larga espera, estos amigos nuestros, puedan encontrarse ahora con sus seres queridos. La paciencia y el coraje que sus familias han demostrado en estos momentos difíciles, no pueden apreciarse lo suficiente", añadió en su cuenta de X.
En las horas previas,
en el exterior del túnel había familiares, trabajadores y curiosos que miraban las operaciones que se prolongaron por varios días. Chanchal Bisht llevaba 15 días esperando a su primo atrapado. Antes de su salida, dijo que estaba feliz de haber podido hablar con él por teléfono. "Pero hasta que no lo vea no lo creeré", dijo. Budhsai Bara, un trabajador del túnel, dijo a la BBC que los hombres atrapados eran sus amigos: “Todos estábamos preocupados por ellos, pero teníamos fe en que saldrían", expresó.
La mayoría de los trabajadores son originarios de los estados del norte y del este de India, incluidos Uttar Pradesh, Bihar, Odisha y Bengala Occidental. Como millones de indios, estos hombres trabajan lejos de sus hogares -a menudo dejando atrás a sus familias-, para ganarse la vida y enviar dinero.
Un rescate complicado
Los rescatistas habían planeado varias opciones para salvar a los 41 hombres atrapados. El más viable, y el que al final dio éxito, fue perforar desde la boca del túnel a través de los 60 metros de escombros del derrumbe. Aunque tuvieron varios reveses, debido a que las perforadoras no avanzaban, lograron llegar al objetivo.
El plan B consistía en perforar verticalmente, a través de la colina sobre el túnel. Pero esta idea dependía de que los rescatistas, pudieran perforar 86 metros para llegar hasta los trabajadores. El lunes por la mañana, habían logrado excavar apenas 31 metros. Entonces, calcularon que con este método, llegarían hasta los trabajadores en cuatro días; si no encontraban obstáculos.
Pero finalmente, optaron por hacer una perforación desde la boca del túnel que avanzó más rápido. Cuando la perforación llegó hasta los obreros, hubo gran alegría. Uno de los rescatistas dijo a la BBC: "En el momento en que atravesamos la última parte de los escombros, hubo un estallido de felicidad dentro del túnel (...). Los hombres atrapados comenzaron a aplaudir y gritar de emoción. Luego las autoridades les pidieron que mantuvieran la calma, y tuvieran paciencia. Les dijeron: 'Los sacaremos uno por uno'", relató.
Los obreros podían estar en contacto con el exterior, a través de equipos de comunicación que incluían cámaras. La longitud total del túnel Silkyara es de poco más de 4.500 m.
El derrumbe del 12 de noviembre provocó el colapso de una parte del túnel, que se encontraba a 200 metros desde la entrada. Los hombres quedaron atrapados entre los escombros, que se extendían a lo largo de unos 60 metros. El espacio donde estaban atrapados los hombres medía aproximadamente 2 kilómetros, por lo que no estaban en malas condiciones para moverse.
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Actualidad Laboral / Con información de BBC
