12-01-2015
Hacer respetar el decreto de inamovilidad laboral en la Siderúrgica del Orinoco (Sidor) pidió al mandatario nacional, el director general del Movimiento de Trabajadores de Base Bolívar, Hugo Bastardo. El dirigente denunció que fue despedido por solicitar la incorporación de los tercerizados a la industria, desde hace 3 años.

“Le hacemos un llamado al Presidente Nicolás Maduro, para que cumpla con el decreto de inamovilidad laboral, ya que fui víctima de despido injustificado por parte de Sidor. Nosotros hicimos un trabajo de lucha social y logramos la incorporación de más de 8 mil que éramos humillados y maltratados por empresas contratistas”, aseguró.

En este sentido también exhortó a los trabajadores de Sidor a participar activamente en las elecciones del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y Similares (Sutiss) a realizarse los días 19 y 20 de enero. Según dijo ese movimiento cuenta con más de 8 mil firmas de respaldo para estos comicios.

“El llamado es para todos los trabajadores. Hay despidos injustificados por parte de la empresa y con las corrientes políticas que hay dentro, para nadie es un secreto que están para velar sus negocios propios y no les conviene que estemos dentro. Los sidoristas deben salir a votar por la alternativa que representamos”, dijo.

En Sidor “se ha pervertido la relación laboral”


A juicio del dirigente empresarial del sector metalúrgico, Jorge Roig, los trabajadores de Sidor “están más preocupados en tratar de obtener y preservar posiciones dentro de un sindicato que preservar los puestos de empleo”. Considera que “se ha pervertido mucho la relación laboral”.

Señaló que los que aspiren dirigir Sutiss deben tener conciencia de lo que ha ocurrido con esa industria, en su paso de ser una empresa privada a una empresa del Estado. “Lamentablemente siento que eso no es así”, dijo al advertir que sobre la caída en la producción.

“Las cifras de este año (2014) son las más bajas que ha tenido, todavía no han publicado las cifras de diciembre, pero si alcanza un millón de toneladas, en comparación con los 4 millones 300 mil que llegó a producir en manos privadas, es quizás el ejemplo más característico que pueda tener una empresa pública que fue entregada y arrebatada, expropiada, en los cuales los resultados son todos perversos”, expresó Roig.

Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas