Durante el último tiempo ha surgido una tendencia orientada a elevar la productividad en las empresas: las juntas de 5 minutos. Hablamos de una práctica orientada a optimizar el tiempo utilizado en reuniones de trabajo y, a continuación, te damos las principales claves al respecto.
¿Qué es la regla de los 5 minutos?
Básicamente, se trata de una forma de llevar a cabo las reuniones de trabajo, una que no permite al jefe de proyectos retener a los miembros de su equipo por más de 5 minutos. El tiempo es uno de los elementos más preciados en la productividad de una empresa, por lo que, si tienes algo que decir que no pueda ser tratado en 5 minutos, es mejor callar.
Esto no solo obliga a los directores de proyectos a generar reuniones ágiles y productivas, sino que también insta a los empleados a prestar más atención y tomarse el trabajo más en serio. Imagina que tienes una reunión en la mañana y un empleado llega 5 minutos tarde: en el pasado, esto no importaría pues -probablemente- a los 5 minutos apenas estaría comenzando. Hoy, el empleado se habría perdido la reunión en su totalidad y quedaría perdido por el resto del día, lo que se vería reflejado en su informe mensual de evaluación.
Además, todos los participantes deben llegar preparados y con sus ideas claras, pues una vez que llega la fase de retroalimentación, cada miembro tendrá de 15 a 30 segundos para hablar antes de ser interrumpido. Esto no solo crea un ambiente más democrático a la hora de exponer las ideas, sino que -poco a poco- los empleados entenderán que su valor se encuentra en lo que tengan que decir y no en la jerarquía. Así, este formato de reuniones ágiles es ideal para optimizar el tiempo y elevar la productividad.
Empezar a ponerla en práctica
Antes de implementar la regla de los 5 minutos en tu oficina, es importante que tengas claras algunas consideraciones.
-Lo primero es entender que hay temas que no pueden resumirse en una reunión de 5 minutos. Por lo que, antes de implementar esta dinámica en tu empresa, evalúa si los temas a tratar son adecuados para este formato.
-A lo anterior, se suma el hecho de que -en la región- pocas empresas han tomado esta tendencia, por lo que es probable que tus empleados no tengan una referencia que los haga estar listos, de antemano, para un cambio de esta magnitud. Lo importante es que, antes de implementar la regla de los 5 minutos, tengas una reunión con ellos para explicarles de qué se trata el asunto. Tal vez debas hacer reuniones de transición, que duren cada vez menos tiempo hasta alcanzar la meta.
-Una buena forma de implementar esta metodología es disponiendo de un reloj de arena -al centro de la mesa- que contabilice 5 minutos, además de entregar una pauta clara y ordenada a cada asistente. Es probable que en los primeros intentos cueste sacar adelante este modelo de reuniones. Pero, con el tiempo verás como todos los miembros del equipo se adaptan, y a partir de ese momento notarás cambios en la productividad y eficiencia.
En general, es una buena idea estar a la vanguardia en cuanto a temas de productividad se refiere. A fin de cuentas, el rubro empresarial es competitivo y, muchas veces, el éxito se reduce a adaptarse o morir en el intento. No tengas miedo de implementar la regla de los 5 minutos y recuerda que, si necesitas apoyo en lo que a consultoría de negocios se refiere, siempre puedes contar con la ayuda de expertos en la materia, para ayudarte a que este tipo de mejoras sean implementadas con total éxito.
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