Tiempos duros para Ryanair. La aerolínea low cost vivió entre abril y junio su trimestre “más desafiante en sus 35 años de historia” por el impacto del coronavirus. Con casi toda la flota en tierra y un 99% menos de pasajeros, registró unas pérdidas de 185 millones de euros, cuando hace un año ganaba 243 millones en el mismo periodo. La compañía irlandesa aseguró que seguirá operando su programa de vuelos habitual entre el Reino Unido y España; a pesar de que el Gobierno británico ha vuelto a imponer una cuarentena, a los viajeros que lleguen desde los aeropuertos españoles. El “mercado permanece abierto” y el “calendario sigue en activo”, afirmó en la BBC Neil Sorahan, director financiero, que tachó de “lamentable” la decisión de Downing Street.
Cifras
El confinamiento y las restricciones de movilidad en los países europeos trastocaron la actividad, pasando de 41,9 millones de pasajeros a 500.000; reduciendo los ingresos de 2.312 millones a 125 –caen el 95%– y la ocupación del 96% al 61%. A día de hoy se opera al 40% de la capacidad de hace un año, y en agosto se alcanzará el 60%. La vuelta a la normalidad va para largo, ya que en septiembre aún se operará al 70% respecto al año anterior.
En estos meses ha apretado su estructura para seguir reduciendo costes, con “modestas reducciones de sueldo” que impedirán grandes pérdidas de empleo, afirma. También negocia con los aeropuertos rebajas en el leasing de aeronaves o en la compra de nuevas. Así, los costes se han reducido el 85% en el trimestre, sobre todo porque ha gastado un 99% menos en combustible con los aviones en tierra. Sobre la devolución de billetes, prevé que el 90% de peticiones de retorno de dinero se resuelvan para finales de julio, tras cuatro meses tramitando reclamaciones.
Con estas perspectivas, la aerolínea prevé que en el conjunto de su año fiscal –acaba de cerrar el primer trimestre– pierda un 60% de pasajeros, a 60 millones. “Será un año muy desafiante para las aerolíneas. Es imposible predecir cuánto persistirá la pandemia, y una segunda ola de casos a finales de otoño es nuestro mayor temor”, se apunta. También prevé pérdidas entre julio y septiembre. En todo caso, afirma tener “el balance más fuerte de la industria” con más de 3.900 millones en caja disponibles –a 30 de junio–. “Desde mediados de marzo el grupo se ha movido rápidamente y de manera inteligente para preservar el efectivo, recortar costes, cancelar programas de recompra y retrasar inversiones no esenciales”, se insiste.
Cuentas
La aerolínea aprovecha sus resultados para cargar, una vez más, contra las ayudas estatales que han recibido Alitalia, Air France-KLM, Lufthansa, SAS o TAP, afirmando que son “ilegales” y que “distorsionan la competencia, y permiten a compañías insostenibles vender por debajo del coste durante los años que vienen”. En cualquier caso, ve una oportunidad para crecer que sus competidores reduzcan capacidad, ya que el sector estará en decaída unos dos o tres años.
Actualidad Laboral / Con información de La Vanguardia