La escasez de alimentos y la inflación en Venezuela estaría haciendo que los trabajadores, sin distinción de rango, se refugien más en las empresas. En este año 2015, se habría incrementado hasta el doble el uso del comedor en las compañías, y las que no tienen, ahora lo exigen, a través de las convenciones colectivas.

A juicio del abogado especialista en el tema laboral, socio de la firma internacional Littler Mendelson, Ricardo Alonso, los trabajadores consideran que a las empresas se les hace “más fácil conseguir la proteína o una alimentación balanceada”. Pero advirtió que esta demanda no excluye la solicitud del pago del ticket de alimentación.

“No consigo la comida en la calle y mi oportunidad de estar bien balanceado, a través del comedor, y por otro lado también pido el ticket porque necesito darle de comer a mi familia”, comentó el abogado sobre el planteamiento de los trabajadores. Según dijo, en el sector privado el monto que pagan las compañías por este beneficio, supera los Bs. 6.750 fijados por el Gobierno venezolano en la Ley del Cestaticket Socialista para los Trabajadores y las Trabajadoras (Lcstt).

Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas