Royal Dutch Shell eliminará hasta 9.000 puestos de trabajo en todo el mundo para fines de 2022, luego de un colapso en la demanda de petróleo y una posterior caída de los precios durante la pandemia de coronavirus.
La compañía energética anunció el miércoles que alrededor de 1.500 empleados ya acordaron una salida voluntaria este año y que la empresa analiza otras áreas con las que puede reducir costos, como menos viajes, menos uso de contratistas y mayor trabajo desde casa. En general, espera que las medidas de reducción de costos aseguren ahorros anuales en costos de entre 2.000 y 2.500 millones de dólares para 2022.
“Tenemos que ser una organización más simple, más ágil y más competitiva, que sea más capaz de responder a los clientes”, declaró el director ejecutivo de la empresa, Ben van Beurden. “Para ser más ágiles, tenemos que eliminar cierta cantidad de complejidad organizativa”.
En junio, su rival BP dijo que estaba eliminando unos 10.000 puestos de trabajo de su fuerza laboral para hacer frente al impacto del virus.
Shell agregó que espera que la producción del tercer trimestre sea de entre 2,15 millones y 2,25 millones de barriles de petróleo equivalente por día. Dijo que los huracanes en el Golfo de México han hecho que bajen los niveles de producción diaria, en unos 60.000 a 70.000 barriles.
Actualidad Laboral / Con información de AP
