¿Ha pasado mucho tiempo sin recibir un ajuste salarial? Es momento de planear un cambio de empleo. Aunque las expectativas de las personas se han transformado, el salario se mantiene como un componente importante para aceptar o permanecer en un trabajo.
Según Computrabajo, el aspecto financiero es parte del bienestar integral del talento, y tiene aún más relevancia en contextos de crisis económicas o alzas en la inflación.
Permanecer muchos años en una sola empresa sin recibir un ajuste salarial, es un motivo de peso para cambiar de empleo, debido al acceso social y de supervivencia que brinda la remuneración, de acuerdo con la plataforma.
En ese sentido, la recomendación de la bolsa de empleo es que las empresas tengan programas y acciones para revisar cada cierto tiempo el salario de sus empleados, ajustándolo a las condiciones económicas para retenerlos.
A diferencia de los incrementos salariales, los ajustes se realizan en función de la inflación con la finalidad de que el empleado no pierda su capacidad adquisitiva.
En ese sentido, Computrabajo destaca la importancia de que las empresas revisen y actualicen periódicamente las compensaciones para mantener al personal motivado y comprometido, principalmente en tiempos de alta inflación. Es por ello que, no recibir un ajuste salarial durante años, puede ser la señal definitiva para que un empleado considere buscar otras oportunidades laborales donde su esfuerzo sea adecuadamente recompensado.
Otros motivos para cambiar de empleo
Cuando una persona se encuentra en un nuevo empleo, existen expectativas positivas ante una nueva aventura. Pero a medida que pasa el tiempo, pueden aparecer indicadores o señales de que el momento de cambiar de trabajo llegó.
Estos son algunos elementos cruciales para saber si es el momento de buscar un nuevo empleo:
Mala cultura organizacional
Al entrar a una empresa, es fundamental identificar los valores personales. Si estos no están alineados, se genera un conflicto; además, al estar en un mal ambiente laboral, se puede ver afectada la salud mental y física.
Un mal jefe
Según Computrabajo, el 43% de los profesionales afirma que dejó su último empleo por tener un liderazgo inadecuado, lo cual está vinculado con una mala cultura organizacional. En las empresas que no tienen una cultura positiva, puede propiciarse una estructura jerárquica, donde los jefes solo buscan controlar.
Compañías sin objetivos claros
Cuando no se tiene un propósito claro, el trabajo puede ser más difícil de realizar, ya que no hay un rumbo o trayectoria que seguir. La tendencia marcada por la generación Z es encontrar organizaciones con objetivos claros para lograr las metas de la empresa, alineándose también con los objetivos personales de cada trabajador.
La plataforma menciona que “es importarte conocer los motivos por los que la gente es promovida a nuevas posiciones. Conocer los objetivos y características puede ayudar a crecer dentro de la organización”.
Productividad en horas de trabajo
Algunas empresas valoran más el tiempo que los empleados pasan en la oficina que la productividad en sí, fomentando que se queden más horas de las recomendables. Este tipo de corporativos tienen un estigma negativo sobre poner límites en el tiempo de trabajo.
Pero en el contexto actual, los trabajadores valoran más la flexibilidad y el equilibrio entre la vida personal y laboral. Ya no se percibe el desempeño como una métrica de las horas laborales.
Mala organización
La falta de un programa onbording, la bienvenida y la integración adecuada a un nuevo trabajo son cruciales para fomentar el sentimiento de pertenencia y un compromiso con la empresa. Si la integración es deficiente o inexistente, esto puede afectar negativamente la moral y el rendimiento del empleado a largo plazo.
La falta de ajustes salariales, los malos ambientes laborales, las culturas sin transparencia o la falta de metas claras, son señales de alerta que indican que es un buen momento de un cambio de empleo.
Los trabajadores buscan una estabilidad financiera, pero también desean un entorno laboral que valore su esfuerzo, ofrezca crecimiento y equilibrio entre la vida laboral y personal, por lo que ignorar estos aspectos puede llevar a una rotación laboral elevada y una baja moral en la empresa. Es fundamental que las organizaciones se adapten a las necesidades y expectativas de sus empleados para mantener una fuerza laboral motivada y comprometida.
Actualidad Laboral / Con información de El Economista México