Sindicatos brasileños difundieron un cronograma de paralizaciones en protesta contra la reforma laboral que impulsa el presiente Michel Temer, pero desistieron de llamar a una movilización general el próximo 30 de junio.

"La Central Única de Trabajadores y las demás centrales sindicales (...) decidieron mantener la política unitaria de enfrentamiento a las reformas del gobierno Temer", indica el texto publicado en una nota de prensa tras una reunión este viernes en la que participaron nueve organizaciones en Sao Paulo.

El objetivo puntual de las agrupaciones es objetar la reforma laboral que impulsa el presidente Michel Temer en el Legislativo como parte de un paquete de cambios estructurales considerados esenciales por el mercado en Brasil.

De acuerdo con el texto difundido por los sindicatos, entre el 27 y el 29 de junio realizarán actividades en los aeropuertos y en el Senado, en tanto que el 30 de junio el llamado es a la paralización.

La CUT confirmó la convocatoria en nota difundida en su portal web, también omitiendo el adjetivo "general" de la manifestación.

En la decisión pesó el hecho de que los trabajadores del sector transporte no se sumarán a la medida de protesta, publicó el diario Folha de S. Paulo este sábado.

El viraje se produce luego de que los dirigentes de las centrales Fuerza Sindical, Unión General de los Trabajadores, Central de los Sindicatos Brasileños y Nueva Central fueran invitados a una reunión con el ministro de Trabajo, Ronaldo Nogueira, agregó el periódico.

Los sindicatos brasileños se han manifestado contra las medidas impulsadas por Temer.

El 28 de abril una huelga general culminó con choques entre policías y manifestantes, con autobuses incendiados en Río de Janeiro y altercados en las inmediaciones de la casa de Temer en Sao Paulo.

Entre 35 y 40 millones de trabajadores del transporte y los servicios públicos se sumaron a esa paralización, según cifras de los organizadores.

Brasil esta saliendo de un proceso que combinó recesión y altos índices inflacionarios. El índice de aumento a los precios (IPCA) se incrementó un 10,67% en 2015 y un 6,20% en 2016. Mientras que el Producto Interno Bruto se contrajo un 3,8% en 2015 y un 3,6% en 2016.

En el trimestre febrero-abril, la tasa de desempleo cerró en 13,6%, equivalente a 14 millones de personas, según números divulgados a fines de mayo por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística.

El presidente Temer, investigado por corrupción pasiva y obstrucción a la justicia utiliza los avances económicos de los últimos meses para intentar mejorar su nivel popularidad, que según una encuesta publicada este sábado por la local Datafolha, cayó a 7%, la peor valoración de un mandatario brasileño en los últimos 28 años.

Actualidad Laboral / Con información de Terra