El Fondo Monetario Internacional redujo a 1,4% la perspectiva de crecimiento económico para América Latina y el Caribe durante 2019. La ralentización de la actividad económica latinoamericana está vinculada directamente a la brutal depresión en Venezuela, cuya economía se contraerá este año en una cuarta parte y otro 10% en 2020. El índice inflacionario llegará a una tasa de 10.000.000%.
Ya la economía de la nación sudamericana se había replegado 18% el año pasado, lo que llevó su caída acumulada entre 2013 a 2018 por encima del 50%. El Fondo dijo que el colapso venezolano genera “un freno sustancial para el crecimiento de la región y de las economías emergentes en ambos años”.
La proyección es una reducción sustancial respecto del 2% que había pronosticado en enero pero supera el crecimiento de 1% alcanzado en 2018. “La segunda mitad de 2018 fue débil y mucho de eso se está arrastrando a 2019”, dijo en conferencia de prensa la economista jefe del FMI, Gita Gopinath.
En cuanto a la economía mundial el FMI redujo a 3,3% sus perspectivas -la proyección más reducida junto a 2016 desde la Gran Recesión de 2009- debido principalmente a las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
Además de Venezuela, los otros países de la región cuyas economías se contraerán en 2019 son Ecuador (-0,5%) y Argentina (-1,2%) pero el Fondo espera que la economía argentina comience a crecer durante el segundo semestre del año cuando la producción agrícola repunte tras la sequía inusual del año anterior hasta alcanzar 2,2% en 2020.
La proyección anual de la inflación argentina es de 30% en 2019 y 21% en 2020.
El FMI consideró como “crucial” la implementación del programa económico que acordó con el gobierno del presidente argentino Mauricio Macri y calificó la eliminación de déficit público durante el ejercicio presupuestario 2019 como “esencial” para reducir las necesidades de financiamiento.
El crecimiento de México se mantendrá este año y el siguiente por debajo del 2% alcanzado en 2018 y el Fondo lo atribuyó a la decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de cancelar la construcción de un aeropuerto en la capital y a la regresión en reformas educativa y energética.
“Es esencial eliminar el retraso de reformas estructurales necesarias, porque ello crearía incertidumbre adicional en detrimento de la inversión privada y el crecimiento del empleo”, reza el informe del FMI difundido el martes.
Brasil pasará de un crecimiento de 1,1% en 2018 a 2,1% este año y 2,5% en 2020.
Actualidad Laboral / Con información de AP