En su informe Pulso semanal número 14, la firma Econométrica de información y análisis económico pone la lupa en la producción petrolera del país y en este sentido señala que desde de la década de los noventa del siglo pasado, la producción petrolera estuvo marcada por un crecimiento sostenido de la producción. De hecho en el 2001, la producción promedio alcanzó un máximo, ubicándose en 3,342 millones de barriles diarios (mbd). Este incremento en la producción fue producto de la gerencia de la Pdvsa meritocracia.
Es a partir de 2014 que se observa que la producción total empezó a registrar caídas sostenidas por encima de 4%. En 2016, el deterioro de la industria petrolera se profundiza: la producción se ubicó en 2,410 millones de barriles diarios, lo que representa una contracción de 8%. Econométrica señala que dicha tendencia pudiera estar explicada por la disminución en la inversión del sector y en el número de los taladros activos. Estos últimos pasaron de 68 a 58 taladros activos, lo cual representa una disminución del 15% con respecto a 2015.
De acuerdo con la OPEP, en 2018 la producción total se ubicó en 1,52 mbd, una caída de 21% en comparación a lo registrado en 2017, y 48% respecto a 2013, cuando inició el mandato de Nicolás Maduro. Este resultado implica un descenso en los ingresos estatales de, aproximadamente, $25.600 millones con la cotización promedio de la cesta petrolera en ese año, $64 por barril.
Pero este año que cursa ha sido el más grave, en el primer trimestre de 2019 la producción del crudo venezolano muestra un profundo deterioro. En enero la producción promedio fue de 1,32 mbd, una caída del 22% en términos interanuales. Asimismo, según el último informe de la OPEP, la producción total de marzo fue de 850.000 barriles diarios, un declive del 31% respecto a febrero (1,23 mdb).
Cabe destacar que, el colapso de la producción petrolera en Venezuela durante marzo de 2019 se acentuó como consecuencia de los apagones eléctricos registrados. En cuanto a la producción petrolera promedio de abril, esta se ubicó en 903.000 barriles diarios. Asegura el documento que la vertiginosa caída de la producción petrolera venezolana “tiene su explicación en una gestión deficiente, que evidencia el estado de destrucción y atraso en el que se encuentra la industria”.
Taladros activos en Venezuela: acercamiento a la inversión realizada
Según el último reporte mensual que público la OPEP, en enero de 2016 el número de taladros activos de Venezuela se ubicó en 67, y en marzo de ese año pasó a 71; sin embargo, no significó una mejora en la producción petrolera. En 2017 se presentó una disminución de 24% en el número de taladros activos respecto al año anterior, fueron 51. Esto podría explicar el desplome sostenido en la producción petrolera venezolana.
En enero de 2018 el número de taladros activos fue de 48., y a partir de ese año se ha profundizado el descenso de taladros activos. Un año después, en enero de 2019, la disminución de taladros activos se ubicó en 27, lo que representa una caída de 44%. Mientras que en abril del año en curso se registró una disminución en los taladros activos a 22. Esta disminución en la operatividad de la producción estaría explicada por una caída en los niveles de inversión.
Actualidad Laboral / Informe Econométrica