Para reducir sus costos, empresas italianas decidieron establecer sus centros para los servicios de atención telefónica, en la ciudad de Durres, Albania. Eso a propósito de la cantidad de albaneses que están regresando a su país, impulsados por la crisis económica de la nación europea. Así lo divulgó la Organización Internacional del Trabajo (OIT), este miércoles, en una nota de prensa.

El caso es que la OIT, con el financiamiento de la Unión Europea, desarrolló un proyecto de modernización de los centros de empleo de ese país, “para ofrecer servicios de colocación bien estructurados y de fácil acceso para las personas que buscan trabajo, basados en las buenas prácticas de los centros de empleo públicos de la Unión Europea”.

La coordinadora del proyecto de la OIT, María da Carmo Gomes, explicó que “el regreso de los migrantes albaneses desde los países vecinos afectados por la crisis económica como Grecia e Italia, representa un desafío para eses país que ya enfrenta un nivel de desempleo alto, sobre todo en los jóvenes”.

Majlinda Mema, directora de la oficina de empleo de Durres, informó que estos centros de llamadas comenzaron a establecerse hace 4 años y, hasta ahora, se han creado 2 mil nuevos empleos. Así mismo agregó que “muchos migrantes albaneses están regresando de Grecia, así que esperamos que en un futuro cercano los centros de llamadas griegos se establezcan aquí”.

En cuanto al salario, señala la nota que es “bastante bajo que el estándar de Europa Occidental (alrededor de 300 euros por un trabajo a tiempo completo). Sin embargo, el costo de la vida en Albania es inferior “ y estos empleos permiten a los estudiantes financiar sus estudios.

Actualidad Laboral / Adriana Salazar Salas