La huelga de los equipos de rodaje de Hollywood, que amenazaba con paralizar la industria cinematográfica estadounidense a partir de este lunes 18 de octubre; se evitó a última hora, gracias a un acuerdo sobre las condiciones de trabajo de estos empleados técnicos. Así lo anunció el principal sindicato del sector. "Es un final digno de una película de Hollywood", dijo Matthew Loeb, presidente del sindicato IATSE (Alianza Internacional de Empleados de Escenarios Teatrales, Técnicos de Películas en Movimiento, Artistas y Artesanías Afines de los Estados Unidos, sus Territorios y Canadá); que representa a decenas de miles de empleados técnicos; en un comunicado emitido el sábado por la noche.
Operadores de cámara, escenógrafos, diseñadores de vestuario, maquilladores y otros trabajadores de atrás de la escena amenazaron con ir a la huelga a partir de la medianoche del domingo; ante el estancamiento de las negociaciones sobre un nuevo convenio colectivo. El acuerdo aún debe ser aprobado por los miembros del sindicato.
Tras meses de conversaciones, la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP) -que representa a Disney, Warner y Netflix- se negó a aceptar algunas de sus demandas. El acuerdo propuesto "aborda cuestiones fundamentales, como los periodos de descanso razonables, pausas para comer. También un salario decente para los que se encuentran en la parte inferior, de la escala salarial y aumentos significativos de compensación" de las empresas, según el comunicado del sindicato.
"Nos enfrentamos a algunas de las empresas de tecnología y entretenimiento más ricas y poderosas del mundo, y conseguimos un acuerdo con la AMPTP que satisface las necesidades de nuestros miembros", añadió Loeb. La AMPTP confirmó el acuerdo a la CNN, sin hacer más comentarios.
La postura de estos trabajadores obtuvo muchas muestras de apoyo, por ejemplo de actores como Julia Louis-Dreyfus o Samuel L. Jackson, y también políticos del Partido Demócrata como Bernie Sanders o Elizabeth Warren.
El último gran movimiento social en Hollywood fue la huelga de guionistas, que paralizó la industria audiovisual estadounidense en 2007-2008. Durante los 100 días que duró la huelga, los ingresos sufrieron una caída de 2.000 millones de dólares, según estimaciones independientes.
Actualidad Laboral / Con información de France 24