Según una información publicada por el diario francés Le Figaro, Huawei, Xiaomi y ZTE han decidido que sus trabajadores chinos viajen 2 semanas antes de lo previsto a Barcelona, con el objetivo de someterse a una cuarentena previa; para así, minimizar cualquier riesgo para la salud, de cara a la afluencia de público que se espera para los días comprendidos entre el 24 y el 27 de febrero por uno de los mayores eventos mundiales de la industria tecnológica. Se trata de un plazo necesario "para asegurar la salud y la seguridad de todo nuestro personal", según ha indicado ZTE.
Las compañías chinas del mercado de las telecomunicaciones —con Huawei a la cabeza— no quieren escatimar en medios, ya que 2020 abre un período crucial por el desarrollo del 5G a nivel mundial. Han estado invirtiendo en esta tecnología durante años y pretenden participar, activamente, en su lanzamiento en Europa. Por el contrario, el fabricante surcoreano LG ha cancelado su participación en el evento de Barcelona. "Esta decisión elimina el riesgo de exponer a cientos de empleados de LG a viajes internacionales, algo que ya se ha vuelto más restrictivo a medida que el virus continúa su propagación más allá de sus fronteras", ha declarado la compañía en un comunicado.
Política antiapretones de manos
Las marcas chinas han adelantado también que planean recurrir a sus trabajadores europeos, en lugar de desplazar a los empleados que se encuentran en las oficinas de China. Esa misión no parece tarea fácil, ya que estas compañías ocupan stands de gran envergadura, con miles de trabajadores distribuidos por toda la feria. Con el objetivo de evitar aglomeraciones muy numerosas, ZTE ha confirmado que anulará su conferencia de prensa programada para el MWC. Xiaomi, que tradicionalmente tiene una conferencia de prensa en China sobre estas mismas fechas, la realizará únicamente por streaming.
Por su parte, los organizadores del evento en Barcelona afirman que la epidemia no pondrá en peligro la celebración del MWC. Con el propósito de proteger a visitantes y participantes, se han llevado a cabo una serie de medidas para limitar el riesgo de infección: sustitución de micrófonos después de cada interlocución, desinfección frecuente de pantallas, inodoros y barandillas de escaleras, entre otras. Los organizadores, incluso, recomiendan que los participantes adopten una "política de no apretón de manos".
Las previsiones apuntan a que más de 109.000 personas acudirán a la edición de este año del Mobile World Congress de Barcelona.
Actualidad Laboral / Con información de Business Insider