Mientras los mercados de materias primas siguen viendo cómo las cotizaciones del petróleo ya están en niveles inferiores a los 50 dólares por barril (la referencia WTI cerró ayer a 44,45 dólares y el Brent, a 48,47 dólares), los actores de la industria petrolera siguen buscando la forma de mitigar el impacto de esta situación en el mercado laboral.
En una reunión entre el Gobierno, gremios y trabajadores del sector –representados en varios sindicatos–, se analizaron los que serían los primeros pasos en busca de un acuerdo para hacerle frente a la difícil situación que se vive en las zonas de producción de hidrocarburos, debido a los bajos precios.
El ministro de Trabajo, Luis Eduardo Garzón, aseguró que teniendo en cuenta que son cerca de 110.000 trabajadores vinculados al sector, hay que buscar la forma de que el impacto sea el mínimo posible, a través de un esquema que debe tener tres elementos claves: primero, el trabajador y su empleo; segundo, mantener la producción para que no disminuyan los recursos de los programas sociales, y tercero, incluir el compromiso social con las regiones.
Al señalar que se trató de una reunión preliminar para explorar las fórmulas para que el efecto en los trabajadores sea el mínimo posible, el presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP), Francisco José Lloreda, indicó que uno de los aspectos que se mencionó fue el de buscar la manera de que otros sectores productivos puedan absorber parte de la mano de obra que dejará de contratarse en la industria, pues es claro que sí habrá un impacto importante. Según el dirigente, si Ecopetrol redujo en 25 por ciento sus inversiones en exploración y 30 por ciento los costos, es claro que habrá un efecto.
La ACP todavía no tiene cifras de los trabajadores que podrían resultar afectados, pues cada empresa irá haciendo los ajustes que considere necesarios.
Por el lado de los trabajadores, el presidente de la Unión de Trabajadores de la Industria Energética Nacional (Uten), Álex Ortiz Bueno, dijo que para el caso de Pacific Rubiales, los trabajadores van a evitar los despidos haciendo algunos ajustes administrativos, pero recalcó: “Si ante cualquier circunstancia tenemos que hacer alguna pausa”, la haremos con el objeto de que se garantice el trabajo.
Para las empresas contratistas, representadas en la Cámara de Servicios Petroleros (Campetrol), lo más importante de la convocatoria es que todos los actores que están en este proceso y en esta situación se sienten a anticipar un problema de fondo que se puede dar en los próximos meses, según dijo su presidente, el exministro Rubén Darío Lizarralde.
Actualidad Laboral / Con información de El Tiempo