27-04-2017
United Airlines anunció el jueves que aumentará a 10.000 dólares la compensación que ofrecerá a aquellos pasajeros que cedan su asiento en vuelos sobrevendidos y que intensificará el entrenamiento de su personal tras el escándalo suscitado cuando un pasajero fue sacado a la fuerza de un avión.
Asimismo, la aerolínea prometió reducir, aunque no eliminar, la práctica de vender más boletos de los que hay capacidad en un avión.
El anuncio vino junto con un informe de la empresa en que detalla los tropiezos que llevaron al incidente ocurrido el 9 de abril en el aeropuerto de Chicago, donde un médico de 69 años de edad fue a sacado a la fuerza de un avión.
La aerolínea no reveló si han disminuido sus ventas de boletos desde el incidente, pero el director general admitió que podría haberles perjudicado.
"Traicioné la confianza del público con este suceso y con la manera en que lo manejamos", dijo Oscar Munoz a The Associated Press. "Hay mucha gente molesta y sospecho que mucha gente está pensando en que no viajará más con nosotros".
A fin de evitar una hemorragia de clientes, United ya había anunciado que no volverá a pedir la intervención de la policía para que saquen a pasajeros de vuelos sobrevendidos y le exigirá a sus tripulaciones que se registren en los aeropuertos con más anticipación. El jueves anunció una serie de medidas adicionales:
Aumentará a 10.000 dólares la compensación ofrecida a pasajeros que estén dispuestos a ceder su asiento. Esa es una cifra tope y no queda claro cuántos pasajeros podrían recibir semejante suma. Actualmente el tope es de 1.350 dólares. Delta Air Lines hace pocos días aumentó su tope a 9.950 dólares.
Hará los arreglos para que cualquier pasajero o tripulante desplazado sea trasladado a un aeropuerto cercano, transportado por otra aerolínea o llevado en carro a su destino.
Intensificará el entrenamiento a su personal de embarque sobre cómo lidiar con casos de vuelos sobrevendidos. Munoz dijo que los agentes de vuelo recibirán adiestramiento adicional sobre cómo aliviar tensiones en casos de enfrentamientos.
El escándalo del pasajero expulsado fue catastrófico para United y ocurrió en un momento particularmente difícil para la aerolínea, que sufrió pérdidas tras su fusión con Continental en 2010 y tuvo varios colapsos tecnológicos que irritaron a sus clientes. El año pasado, sin embargo, disminuyeron los retrasos y los casos de equipajes extraviados y recientemente develó planes para ampliar su servicio.
Actualidad Laboral / Con información de AP