Este jueves, el Metro de Caracas amaneció como un desierto debido al paro cívico convocado por la Mesa de la Unidad Democrática como medida de protesta en contra del gobierno de Nicolás Maduro.

La Línea 1, desde Propatria hasta Palo Verde, presenta poca afluencia de personas si se compara con un día normal en la capital, en los que el servicio está atiborrado de gente.

Incluso Plaza Venezuela, donde la gente se empuja y pelea para ingresar en los trenes, se encuentra totalmente vacía. Apenas 5 o 10 personas se ven en la estación.

Freddy Guevara, primer vicepresidente del Parlamento, indicó ayer que el paro consiste en que la gente se mantenga en su casa. Si van a salir, debe ser para trancar calles.

Actualidad Laboral / Con información de El Nacional