Capital Humano
El trabajo tiene sus propias demandas, tiene sus ciclos y ritmos que no paran. Pero, los seres humanos tenemos momentos de fragilidad, sea porque la salud flaquea, porque estamos pasando por una dificultad familiar, porque hemos sufrido una pérdida o porque estamos en medio de una situación que nos impide meter el acelerador y avanzar a la velocidad que se requiere.